Partido número tres de la liga en el cual jugábamos contra un equipo repleto de chicos. El Maristas venía con mucha ilusión de llevarse el partido y casi lo consiguen. Los primeros cuartos consiguieron una ventaja que por, mucho o por poco, hicieron que se llevarán el marcador a su favor. No obstante, a mitad del partido supimos reaccionar y conseguimos darle la vuelta. Explotando la defensa con la presión a todo el campo y los tiros de dos en los últimos minutos del cuarto conseguimos empatar el partido.
Dulce sabor de boca que supimos ir de abajo a arriba.
Un regalo perfecto por mi cumpleaños.
-Jesús Llorente-