Nos enfrentábamos de nuevo a un rival directo y llegábamos con muchas ganas de realizar una buena actuación. El primer cuarto fue un tanto desigual, ya que fallamos todas las entradas a canasta que intentamos. No supimos aprovechar nuestros puntos fuertes, y en los últimos cuartos nos vimos obligados a defender al máximo. Las canastas fáciles del rival y sus contraataques nos llevaron a una desventaja muy amplia al inicio del último periodo.
Aun así, decidimos centrarnos en la defensa tal y como nos indicó el entrenador, consiguiendo un parcial de 16-1 en un solo cuarto, obligando al rival a sustituir, primero a varios jugadores y después a todo el quinteto, pues no encontraban cómo atacar nuestra defensa.
En términos generales, podemos parecer algo perezosos, pero si queremos, somos capaces de dejar al rival a cero puntos con la intensidad y la actitud adecuadas.
-Jesús Llorente-