Nos enfrentamos al equipo Loyola con solo 10 jugadores disponibles. El equipo contrario comenzó con un ritmo muy alto que mantuvo durante todo el partido. Nuestros jugadores no lograron contrarrestarlo, lo que terminó en un partido muy desequilibrado a su favor, reflejado en un marcador con un alto nivel de acierto por su parte y pocas canastas por la nuestra. Es necesario seguir trabajando para mejorar.
– María Martínez –